30 de marzo de 2017

Cinco razones para exigir arquitectura abierta en fondos

Un banco que aspire a ofrecer unos servicios financieros de calidad debe poner a disposición de sus clientes los productos que mejor se adapten a sus necesidades. Para ello, lo primero será identificar cuáles son realmente las necesidades del cliente, saber para qué ahorra o cuándo debe disponer de ese ahorro, por ejemplo. Una vez conocidas estas necesidades, el siguiente paso es ofrecer aquellos productos que sean más adecuados para él. Cuanto más amplia sea la oferta, más oportunidades para el cliente. Si hablamos de invertir unos ahorros en fondos de inversión, las entidades que cuentan con arquitectura abierta nos ofrecen un servicio de valor añadido ya que permiten seleccionar los mejores productos y diversificar la inversión.

Pero ¿qué significa arquitectura abierta en fondos de inversión?

Entendemos por arquitectura abierta cuando la entidad financiera no ofrece únicamente los fondos de inversión de su propia gestora, sino también los de un amplio abanico de las principales gestoras del mercado.  No todas las entidades financieras disponen de arquitectura abierta de fondos. Incluso algunas entidades sólo ofrecen este servicio a clientes de banca privada para patrimonios elevados.

Sin embargo, este es un factor muy importante a tener en cuenta. No disponer de arquitectura abierta limita las oportunidades de nuestro ahorro. Hemos de asumir que ninguna gestora puede ser la mejor en todos los sectores de actividad y en los diferentes mercados geográficos, poder comparar entre las existentes en el mercado nos da la posibilidad de elegir los mejores fondos en cada caso.

Cinco razones por las que es conveniente elegir una entidad financiera que cuente con arquitectura abierta en fondos:

1. Personalización de la oferta

El primer paso es definir nuestro perfil de riesgo, objetivos y necesidades. Los productos de inversión deben adecuarse a nuestros objetivos de ahorrador, y no al revés. Por ello, es importante contar con un amplio abanico de posibilidades que nos permita elegir la inversión más adecuada. Los fondos propios de las entidades no siempre encajan con nuestro perfil u objetivos, por lo que un banco que priorice a sus clientes les ofrecerá lo mejor del mercado, sea un producto propio o no. Un banco debe acompañar al cliente en el proceso de selección, destacando los fondos más adecuados e incluso elaborando carteras modelo.

2. Adaptarse al entorno

La adaptación al entorno de mercado es indispensable para que las inversiones obtengan la rentabilidad esperada. El universo de fondos es enorme y permite escoger en cada momento los activos más interesantes, teniendo en cuenta que además en fondos de inversión tenemos la ventaja de poder cambiar de un fondo a otro. Una entidad con arquitectura abierta puede ofrecer la diversificación necesaria para lidiar con los movimientos de los mercados.

3. Internacionalización

En un mundo global, las inversiones deben ser también globales. Ofrecer productos de un número amplio de compañías gestoras de fondos, representa disponer de equipos de expertos en diferentes activos y países, y por tanto el ahorrador se beneficia de ese conocimiento y del acceso a diferentes mercados. En concreto, permite que las carteras de fondos de inversión estén mejor diversificadas, contando con la experiencia de gestores en distintas zonas geográficas que se centran en analizar, tanto la evolución del sector de la automoción en China, como el nivel de exportaciones del petróleo de EEUU.

4. Rentabilidad

No es lo mismo un fondo bueno que uno excelente. A la hora de realizar inversiones, es importante tener en cuenta las rentabilidades reales que se pueden obtener en función del perfil de riesgo. Un ahorrador pierde rentabilidad si el fondo que mejor se ajusta a sus necesidades no es el mejor en su categoría.

5. Orientación al cliente

Contar con un servicio de inversiones que incluye arquitectura abierta es, un indicador de la vocación de un banco de ofrecer a sus clientes unos servicios financieros de calidad. Ofrecer a un cliente lo mejor del mercado, independientemente de que sea o no un producto propio, y facilitarle elegir la inversión más ajustada a sus necesidades, demuestra cómo es la atención al cliente de un banco.

No todas las entidades son iguales ni disponen de la misma calidad de servicio al cliente. Ten en cuenta estos factores a la hora de elegir la entidad financiera más adecuada para contratar tus productos de inversión.

Disclaimer: La información contenida en este documento no debe considerarse como asesoramiento de inversión y sólo describe las características de productos. Las decisiones de inversión se deben basar en el folleto completo o simplificado de venta. El folleto de venta contiene información detallada de los posibles riesgos. Antes de realizar una inversión consulte con su gestor.
Deutsche Bank, S.A. Española – NIF A-08000614, R.M. Madrid, T.28100, L.0, F.1, S.8, H.M506294, I.2

 

Secciones financieras

Economía

Todas las noticias

Nuestras redes sociales

twitter    linkedin    Youtube    facebook

Comparte Espacio de Finanzas en tus redes

twitter    facebook    linkedin