2015, el año para invertir en acciones y cómo hacerlo

¿Por qué 2015 es el año para invertir en acciones? Porque actualmente, tanto el mercado monetario como la renta fija pública están ofreciendo tipos de interés realmente bajos; y se estima que todavía seguirá siendo así durante un buen período de tiempo. Por otro lado, los analistas consideran que el crecimiento mundial se adentra en una nueva fase de expansión que debería mejorar las expectativas de beneficios y favorecer subidas de las cotizaciones bursátiles.

A la hora de invertir en renta variable podemos hacerlo a través de fondos de inversión que inviertan en acciones en mayor o menor medida, o bien directamente en bolsa, normalmente a través de un bróker o agente de bolsa. Pero el objetivo será diferente. El del fondo no es otro que ser más rentable que la media de la bolsa, batiendo al índice al que esté referenciado. En el caso de la inversión directa en un valor bursátil, nuestro objetivo puede ser muy ambicioso. Hay quien espera multiplicar por 2, 3 o 10 su inversión. Pero aunque pueden detectarse atractivas oportunidades en el mercado, esta opción es recomendable para un inversor experimentado, formado y correctamente asesorado.

Porque no todo el monte es orégano. Hay que tener en cuenta que, siguiendo el principio universal de “a mayor rentabilidad mayor riesgo”, el inversor interesado en obtener una mayor rentabilidad con sus acciones deberá asumir más riesgo. Es por eso que el primer paso del buen inversor siempre debe ser buscar un asesoramiento financiero de calidad, proporcionado por una entidad gestora de prestigio que ofrezca información diaria sobre la evolución de los mercados y que dé acceso a las recomendaciones de sus analistas.

Por último, no olvide analizar los costes: la entidad a través de la que opere en bolsa debe ofrecerle tarifas de custodia y  compra/venta de acciones  competitivas. Porque de lo que se trata es de maximizar las ganancias y minimizar los gastos con las mejores condiciones.